miércoles, 31 de diciembre de 2014

Navidad en Biella



¡Hola a todos!

Esto no será una entrada al uso. Es un pequeño recopilatorio fotográfico de unos días que he pasado en Biella celebrando la navidad. Pero como siempre, cualquier excusa es buena para pajarear un poco. En esta ocasión las imágenes fueron tomadas en la Baraggia de Candelo, en el parco della Burcina y en el parco di Chiavazza.

Mirlo acuático - Merla d'aigua - Merlo acquaiolo - Cinclus cinclus 

Foto puramente testimonial del mirlo acuático, pero era solo para que veáis que nunca falta a su cita. Es una suerte tener animales como este a 5 minutos a pie de casa.





Reyezuelo sencillo - Reietó - Regolo - Regulus regulus

Birdwatching bajo cero



Alcaudón norteño - Botxí septentrional - Averla maggiore - Lanuis excubitor


El paisaje frío delle Baragge

Y la estrella del día...




Pito negro - Picot negre - Picchio nero - Dryocopus martius



Pinzón vulgar - Pinsà comú - Fringuello - Fringilla coelebs 



Mirlo - Merla - Merlo - Turdus merula


Petirrojo - Pitroig - Pettirosso - Erithacus rubecula

Pues esto es todo en esta pequeña entrada-resumen. La próxima será de la otra mitad de mis vacaciones, en mi Cádiz.

¡Feliz año a todos!



martes, 23 de diciembre de 2014

Análisis de egagrópilas



¡Hola a todos!

En esta entrada os contaré mi primer análisis serio de egagrópilas.

Muchos os preguntaréis...¿Que es una egagrópila? Pues es simplemente una regurgitación de material no digerible que hacen las aves. En otras palabras, bolas de pelo, huesos, quitinas de insectos, espinas de peces,etc. Lo hacen las aves carnívoras e insectívoras, pero las más conocidas son las de las rapaces nocturnas. La razón es que sus fluidos gástricos son menos potentes que los de las rapaces diurnas, por lo que los restos óseos son mas fácilmente identificables, pudiéndose  así hacer un estudio de la dieta del animal o incluso de la población de micromamíferos de la zona.

Las egagrópilas que he usado para este análisis son las que encontré en la salida a los secanos de Lleida, y corresponden a una lechuza. Intentaré explicar lo mas claramente posible la metodología usada y las claves de identificación de los mamíferos que encontré y alguno de los que podría haber encontrado. Al ser mi primera vez es más que probable que haya cometido algún error, espero que sepáis perdonármelo y que, por favor, me lo comentéis para poder subsanarlo en futuros análisis.

Las tres egagrópilas a analizar

Hay dos métodos para deshacer la egagrópila, el método seco y el método húmedo.

- En el método seco, se desmenuza la egagrópila separando los huesos, teniendo especial cuidado con cráneos y mandíbulas. Posteriormente se introducen en agua oxigenada unas dos horas, lo que blanquea los huesos y termina de separar los pelos. Finalmente se puede usar un tamiz fino para poner los huesos bajo el grifo y conseguir una limpieza total.
- En el método húmedo, se introducen las egagrópilas en alcohol rebajado en agua (o agua oxigenada, también rebajada). Los pelos flotarán y los huesos permanecerán en el fondo. Este método es un poco engorroso porque hay que limpiar cada hueso de pelos mojados individualmente, pero en teoría es más rápido.
 En esta ocasión usé el segundo, pero no por nada en particular, solo porque era el que conocía. Cada método tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Probablemente en la próxima ocasión use el método seco.

Así que me puse manos a la obra y empecé a deshacerlas una por una.








Pues esto es lo que salió de la primera egagrópila. En principio fueron dos ratones (luego explicaré el porqué, además de identificar la especie), pero parece que tenía algún hueso de sobra. La verdad es que no se si las lechuzas sueltan todo lo que tienen en el estómago de golpe o pueden hacer varias egagrópilas con distintas comidas. Por favor, ¡si alguien lo sabe que me responda!

Seguimos con la segunda...







Es curioso, pero este día se cambió la dieta. En esta egagrópila había tres musarañas y un ratón. Se pueden observar los huesos de menor tamaño de las primeras.




Y finalmente la última de las egagrópilas...





No me puedo quejar, otra especie distinta. Un topillo y un ratón. La diferencia de tamaño es considerable.




Este es el balance, en tres egagrópilas cuatro ratones, tres musarañas y un topillo. Perfecto para comentar las distintas especies que podemos encontrar.

La identificación de las especies se lleva a cabo mediante los cráneos. Podemos encontrar varios tipos de animales en egagrópilas, sobre todo en las de búho real, pero yo me centraré en pequeños roedores e insectívoros.

Lo primero que debemos mirar es su dentición:

Roedores


 Si presenta grandes incisivos, sin caninos, y una amplia diastema (separación entre incisivos y molares) es un roedor.


Vemos claramente como la dentición se compone de (de derecha a izquierda) unos incisivos, un amplio hueco (diastema) y seguidamente la serie de molares.

Ahora tendríamos que mirar los molares. Si tiene molares redondeados y al extraerlos vemos que las raíces son alvéolos indepedendientes, entonces es un múrido (ratas y ratones). Si la serie molar mide más de 6mm, entonces nos encontramos con una rata (rata negra rattus rattus o rata parda rattus norvegicus). En caso contrario, hay que mirar el número de alvéolos de la raíz de la primera muela del cráneo. En caso de tener 3 alvéolos, es del género mus (ratón doméstico mus musculus o ratón moruno mus spretus). Si tiene 4, es del género apodemus (ratón de campo apodemus sylvaticus o ratón leonado apodemus flavicollis). Finalmente, si tiene 5 alvéolos, o la serie molar mide menos de 3mm, se trata de un ratón espiguero micromys minutus.

Esto puede parecer un poco lioso, pero pondremos de ejemplo uno de los cráneos de ratón que hemos encontrado:





Si observáis a vuestra izquierda del cráneo (sería la serie molar derecha del ratón), hay un hueco con tres pequeños agujeros, donde antes estaba la muela (se aprecia mejor en la segunda foto). Pues bien, eso son los alvéolos. En este caso son tres, por lo que nos encontramos con el género mus. Las diferencias entre un mus musculus y un mus spretus son muy sutiles, de  hecho no tengo total seguridad de acertar, pero por algunas claves de identificación que he encontrado en la red y, sobre todo, por el entorno donde encontré la egagrópila, lo identifico como un ratón moruno mus spretus.


Detalle del pequeño molar extraído. Se pueden apreciar las tres raíces.

El siguiente caso entre los roedores sería que la serie molar formara triángulos alternos con diferentes formas y los molares no tuvieran raíces. En este caso nos encontramos con micrótidos (ratas de agua y topillos). Si la serie molar mide más de 7.5 mm, es una rata de agua arvicola sapidus. En caso contrario, es un topillo. Para estos hay que tirar de libro, puesto que las claves son bastante complicadas y se basan en pequeñas diferencias en el dibujo molar y medidas en la diastema. 

Veamos nuestro ejemplo:







 Vemos que el dibujo del lado derecho de la foto (sería el lado izquierdo del topillo) coincide con el dibujo SI (serie molar Superior Izquierda). La que está en azul en el dibujo es la que hace que se diferencie de otras especies, pero por no encontrarse en la zona donde hallé la egagrópila no lo he tomado en consideración. Por lo tanto nos encontramos con un topillo mediterráneo microtus duodecimcostatus, por otro lado, el más común en la península.


Insectívoros

Bueno, prácticamente todo lo que no se corresponda con lo anterior quedará englobado aquí. Observamos dentición típica de carnívoro, por decirlo de alguna manera. Tienen incisivos ganchudos, después unos dientes con una sola punta (unicúspides) y finalmente molares también puntiagudos, Son las musarañas y musgaños.

Las musarañas se dividen por el color de la punta de sus dientes. Las musarañas de dientes rojos pueden tener cinco unicúspides en la mandíbula superior y tener los incisivos inferiores serrados, entonces serán del género sorex. Si en cambio tienen cuatro unicúspides y los incisivos inferiores son lisos, serán del género neomys (musarañas acuáticas).

Las de dientes blancos pueden tener cuatro unicúspides, entonces tenemos un musgaño enano o musarañita suncus etruscus. Si tienen tres unicúspides, nos encontramos con el género crocidura.

Como en el caso de los topillos, para diferenciar las diferentes especies necesitaremos un libro, puesto que las claves son variadas.

Nuestro ejemplo:



Se observa el tipo de dentición, muy diferente al del anterior grupo, los roedores.




Podemos contar facilmente los tres unicúspides de la en esta foto, justo por detrás de los incisivos y antes de que empiecen los molares

.



Aquí se cumplen dos requisitos. Si la longitud de la mandíbula es mayor de 10mm (en este caso 13mm) y la longitud condilobasal (longitud del cráneo, para entendernos) es superior a 18mm (en este caso 19,3mm), la especie es una musaraña gris crocidura russula. Por otro lado, es la que más encontraremos en las egagrópilas generalmente.


Las especies encontradas

Bueno, pues a grandes rasgos esto es lo que podemos encontrar en nuestras egagrópilas. Para profundizar un poco más, conviene documentarse en la red o con algún libro especializado, pero a nivel de aficionado creo que esto es más que suficiente.

Ahora unas curiosidades:

Huesos de uno de los ratones



Esto es un incisivo extraido de la mandíbula inferior del topillo. El tamaño es impresionante.



Composición aproximada del esqueleto. Me faltan muchos huesos que se perdieron en el proceso.



Un detalle muy curioso es que las lechuzas matan a sus presas de un picotazo en la cabeza. Esto dificulta mucho la identificación de los cráneos porque todos tienen un enorme agujero en la zona de la nuca. En especialmente evidente en el cráneo del topillo.


Material utilizado para el análisis


Pues eso es todo. Espero no haberos aburrido mucho y que esto os pueda servir alguna vez. 

¡Muchas gracias a todos y hasta la próxima!


PD: Hace 20 años fui de excursión con la escuela a la sierra de Cazorla. En el centro de interpretación nos llevaron a dar un paseo por el bosque a recoger egagrópilas para su posterior análisis. Yo era solo un niño, pero recuerdo que aquella experiencia me fascinó y siempre he querido volver a repetir. Ahora, con la excusa de la ornitología, he tenido oportunidad de volver a hacerlo y la verdad es que ha sido tan divertido o más que como lo recordaba.